El hockey subacuático tiene sus orígenes en la localidad costera de Portsmouth, Gran Bretaña, en el año 1954, cuando el secretario de la Southsea British Sub-Aqua Club, Alan Blake, pensó que sus alumnos de buceo podrían mejorar sus habilidades con el tubo de respirar (snorkel) mientras jugaban con unos improvisados palos y un disco deslizante en el fondo de una piscina.
A principios de la década de los sesenta esta disciplina salta a otros continentes, llegando a países como EE. UU., donde el hockey subacuático sufre algunas alteraciones técnicas propuestas por Bill Neil, las cuales son adoptadas también en Canadá. A partir de ese momento, este deporte, comienza a propagarse y se inician los primeros torneos y competiciones oficiales. En Sudáfrica se juegan los primeros campeonatos nacionales en el año 1964 y en Australia se realizaron en 1965.
En Francia no se da a conocer hasta el año 1967 de la mano de Roger Chatelain. Sin embargo, no se llegó a organizar un campeonato nacional hasta 1982 en Reims.
La primera Copa de Europa se celebra en Charle Roí (Bélgica) en 1979. España se hizo de rogar y tuvo que esperar hasta principios de los noventa para conocer el hockey subacuático de la mano del biólogo y exjugador de la selección francesa, afincado en Barcelona, Laurent Alquier, quien difunde este deporte desde el Club Inmersión Biología (CIB) y con el que participa, por primera vez como selección, en el VII Campeonato de Europa de 1997.